Mis Pies Están En Peligro
Es mundialmente conocido que de un 20 -25% de los pacientes diabéticos sufrirá de complicaciones severas en sus pies. Se ha determinado que el factor de riesgo principal que existe en pacientes que pierden una extremidad es la Neuropatía Diabética.
Nuestros pacientes diabéticos pueden sufrir de Neuropatía dolorosa o de Neuropatía con total ausencia de sensación. La Neuropatía dolorosa se caracteriza por sensaciones de hincadas, ardor y calambres en pies y piernas especialmente durante horas de la noche aunque pueden estar presentes a través de todo el día. El tratamiento de Neuropatía dolorosa comienza con el control de los niveles de glucosa en sangre. En muchas ocasiones podemos mejorar o eliminar estos dolorosos síntomas solo con pequeños ajustes que resulten en un mejor control de la diabetes. Existen medicamentos orales que alivian los dolores al igual que diferentes modalidades terapéuticas que aumentan el flujo de sangre a los nervios periferales.
La Neuropatía más peligrosa es la que causa total falta de sensación en nuestros pies. El hecho de que un paciente no sienta una herida punzante o lesión causada por un zapato, provoca una cascada de eventos que en muchas ocasiones lleva a consecuencias catastróficas como es perder una extremidad inferior. Las estadísticas nos dicen que un 68% de los pacientes que pierden una pierna, pierden la otra en menos de cinco años.
Una condición bien común que esta relacionada y es causada por la Neuropatía Diabética se conoce como Neuroartropatía de “Charcot”. Los pacientes generalmente visitan los hospitales con la queja de un pie hinchado, enrojecido y caliente. Al preguntarle sobre el origen de estos síntomas, por lo general, no recuerdan ningún trauma o evento relevante a la condición aquejante. La presentación de la Neuropatía de “Charcot” es muy similar a la presentación de una infección, así que muchos pacientes son tratados con antibióticos orales o intravenosos sin muy buenos resultados. El diagnóstico de esta condición es clínico y sobre todo radiológico, ya que las placas muestran fracturas y dislocaciones de una o varias articulaciones y huesos. Luego de diagnosticar esta condición, el paciente debe ser tratado con inmovilización total del pie afectado hasta que las placas demuestren reparación de las fracturas. En muchas ocasiones estas fracturas tienen que ser reconstruídas quirúrgicamente. De no atenderse adecuadamente el paciente podrá sufrir colapso del arco del pie que causa úlceras plantares. Estas úlceras en muchas ocasiones, se infectan y ponen en riesgo al paciente a perder su extremidad.
Los pacientes diabéticos deben conocer cómo prevenir las complicaciones de pie diabético al igual que los tratamientos disponibles para tratar una complicación que ya ha comenzado. Precauciones simple como, no caminar descalzos, no sumergir los pies en agua caliente, evitar zapatos apretados, mantener buena higiene de sus pies y evaluar visualmente ambos pies, pueden prevenir accidentes que podrían complicarse rápidamente y concluir en problemas mayores.
El paciente que sufre de una complicación de pie diabético debe ser visto por un equipo de especialistas que pueden entrar en juego en diferentes etapas del tratamiento de esta complicación e incluye a Medico Podiatra, Internista, Endocrinólogo, Infectólogo y cirujano Periferovasculares.
Autor
Dr. Carlos Arroyo Romeu,DPM,FACFAS
Director del Instituto de Pediatría y Pie Diabético de
Puerto Rico y posee un “Fellowship” en
Pie Diabético y salvamiento de Extremidades